Caracas tiene autovías y montañas. Por las autovías el flujo de automóviles es demoniaco, pero no me disgusta. Me gusta el Jeep Gran Cherokee, que es uno de los modelos preferidos por los caraqueños. La gasolina vale mucho menos que el agua.
Ayer la editorial Candaya organizó una fiesta en la Librería caraqueña El Buscón. Fue un éxito total de público. No se cabía en la librería. Era espectacular. Vinieron muchos escritores, periodistas, fotógrafos, artistas, y políticos caraqueños. Se presentaban las últimas novedades de la editorial, con presencia de los autores: Ednodio Quintero, Miguel Serrano, Cristina Falcón, Sergio Chejfec, Ernesto Pérez Zúñiga. Tomamos vino (no es frecuente en Venezuela y es muy caro aquí) y bombones. Sólo pude comerme un bombón, pero estaba delicioso.
Compré muchos libros.
Ahora está lloviendo en Caracas.
Si Chávez me regala un Gran Cherokee, me quedo.
Dentro de un rato cruzo el Atlántico, nadando, claro. Los aviones me dan miedo. Prefiero nadar, es más sano.
miércoles, 15 de julio de 2009
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2 comentarios:
Calienta bien los músculos antes de nadar, no vaya a darte un tirón y...
Una pregunta, recurdo un poema q decía(algo así): "...sólo cargo con mi muerte y mi salario y soy feliz...".
¿A qué libro pertenece?
Yo tengo Resurrecc y Calor y no lo encunentro por ningún lado...
Saludos!!
Nadar, significa hacer nada, tirarse al agua y dejarse llevar. Tráete un un par de pozos de petroleo para petrolear al que sale de la tarta, lo tienes cascarillado.
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