Si hablando con alguien de "Érase una vez en América" de Leone, ese alguien menciona "El Padrino" de Coppola, entonces ya ni me pongo a hablar de Tour de Francia. Entonces, simplemente me voy sin despedirme y no quiero volver a hablar con ese tío en toda mi puta vida. No es por desdén, qué va, es porque no me descubra. Es por miedo.
lunes, 3 de diciembre de 2007
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6 comentarios:
http://es.youtube.com/watch?v=8vyAXi8Ivv0
Para no salir corriendo.
Me ha gustado mucho la presentación de esta tarde. El libro también me ha gustado: la historia es muy humana y las fotos son geniales, dá la sensación de que suenan los ecos del pasado. Aunque, como bien dicen los autores y tú mismo, no demasiado lejano. Me ha encantado conocerlos, Manuel.
Por cierto, tiene razón Ana, en lo de las patillas. Te sientan bien. Gracias por todo y muchos, muchos, besos MVV.
P.D. Muchos libros reflejan el antes y el después de un cambio social o cultural, pero casi nunca "el durante", y "Masada Signos", pienso, lo ha reflejado muy bien. Y así, podran recordar otras formas de vida las generaciones del futuro. Me he quedado con ganas de más. Y tienes razón: la foto del espejo es sensacional.
Lo de tus patillas, ¿no tendrá algo que ver con la vena de bandolero, que te ha salido en la columna de hoy? je,je,je. Eres genial Manuel. Muchos besos.
Érase una vez en América es una de mis películas favoritas desde que se estrenó (que era yo muy joven) y luego me he pasado la vida preguntando y no había manera de encontrar a nadie que la hubiese visto. Tengo la película y la banda sonora. Siempre que oigo Amapola me acuerdo de aquella niña bailando en la trastienda del bar... Siempre que oigo Yesterday me acuerdo del regreso de Noodles a la estación de Nueva York, ese De Niro envejecido por el tiempo y la traición. Me alegra saber que alguien coincide en esa emoción. En fin.
A Erase una vez en América (Erase una vez el cine, Erase una vez la vida), le perdono todo hasta el Yesterday...
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