Yo fui: Un Oporto de 16 años, muy frío, a las 13,24 horas del mediodía, en una terraza portuguesa, frente al Atlántico, un día de mayo soleado y duro de cuerpo, del año...
Sería 1979 ¿no?. Sin duda es el mejor lugar para tomarse un Oporto, frente al Atlántico, contemplando el camino tantas veces recorrido y que hicieron de éste vino símbolo de fortaleza. Yo no lo he probado, pero puede que lo haga un día de estos, Manuel. Besos mil.
Yo era poca cosa: un tetra brik de vino blanco que un mendigo robó en un Alcampo, junto a la iglesia en la que siempre pedía. Luego viví una temporada en la vejiga del mendigo. Allí estaba bien, no me faltaba de nada, la verdad, pero un día me entraron ganas de conocer mundo y fui nube y, más tarde, trozo de mar. Luego me uní a un tsunami. Me arrepiento de lo que hice, pero he conocido a un enema maravilloso y ahora me dedico a las lavativas. Creo que por fin soy feliz.
Manuel Vilas es narrador y poeta. Ha publicado los libros de poemas: "El Cielo" (DVD Ediciones, 2000), "Resurrección" (Visor, XV Premio Internacional Jaime Gil de Biedma, 2005), "Calor" (Visor, VI Premio Fray Luis de León, 2008). Como narrador es autor del libro de relatos "Zeta" (DVD, 2002),de las novelas "Magia" (DVD, 2004), "España" (DVD, 2008) y "Aire Nuestro" (Alfaguara, 2009).
5 comentarios:
Sería 1979 ¿no?. Sin duda es el mejor lugar para tomarse un Oporto, frente al Atlántico, contemplando el camino tantas veces recorrido y que hicieron de éste vino símbolo de fortaleza. Yo no lo he probado, pero puede que lo haga un día de estos, Manuel. Besos mil.
yo fuí un oporto de Coimbra y el largo quehacer de los tranvias de Lisboa ascendiendo al barrio alto....saludos y abrazos cv.
¡tú eres una metonimia!
mañana te veo.
muak.
1868
Yo era poca cosa: un tetra brik de vino blanco que un mendigo robó en un Alcampo, junto a la iglesia en la que siempre pedía. Luego viví una temporada en la vejiga del mendigo. Allí estaba bien, no me faltaba de nada, la verdad, pero un día me entraron ganas de conocer mundo y fui nube y, más tarde, trozo de mar. Luego me uní a un tsunami. Me arrepiento de lo que hice, pero he conocido a un enema maravilloso y ahora me dedico a las lavativas. Creo que por fin soy feliz.
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