Me alegro de que le hayan dado a Bob Dylan el Príncipe de Asturias de las Artes. Aunque me hubiera alegrado mucho más si se lo hubieran dado a Lou Reed. Con este premio se confirma que Bob Dylan ya no importa, y yo soy dylaniano acérrimo. Por tanto, aún nos queda Lou Reed, a este parece que de momento no le dan premio.
jueves, 14 de junio de 2007
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8 comentarios:
No estoy segura de que este premio certifique una defunción. Lo han recibido muchas personas jóvenes y en plena forma. Saludos cordiales.
Quizás la respuesta este en el viento...pero como tantos otros lo que fueron para nosotros sólo nuestra memoria lo guarda...nos vemos.
A mí Dylan hace mucho que dejó de interesarme, cuando actuó delante del Papa ya pasé página, aunque claro, ayuda el hecho de que haga décadas que no crea nada que valga de verdad la pena. Yo también prefiero a Lou Reed, y reivindico desde aquí a Elliot Murphy, el tercero en discordia y el que sigue al margen de todo.
Dylan importa, y Lou y el tal Murphy: ya les gustaría a los parias del Premio dar o quitar nada a nadie: menuda panda de maricas más grande!
Hace tiempo que los Asturias sólo se premian a ellos mismos.
Lo chulo es que ahora pondrán una estatua por ahí de Dylan, o una calle junto a la de Paul Auster, o alguna otra genialidad de esas de alfombra roja que tanto les pone.
Yo también reivindico a Murphy (y los Stormy).
Veo mucho resentido con los premios...
La voz de Dylan ahora es horrorosa, y sus versiones actuales de los temas antiguos también. Pero siempre será Dylan.
Y me uno a la reivindicación de Murphy, y cómo no, de Stormy Mondays
pues yo soy más de Leonard Cohen
o,
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